
BAJO EL AGUA
Cuando nos encerraron en las mazmorras, dijo Marta:
-Madre mía, yo solo quería conocer a los primos de Itziar ¡Es mi primer día y me lo estoy pasando genial!
-De pronto, le cayó una gota en la cabeza a Marta
-Uy, ¿Qué ha sido eso?
-Marta, retira eso
-¿Por qué?
-¡Porque nos vamos a ahogar!
-Oh no, se dirige hacia nosotros
-¿El qué?
-¡Esa cantidad de agua!
El agua se dirigía hacia nosotros a tal velocidad que no nos dio tiempo a reaccionar. Nos quedamos inconscientes, pero yo, con el cristal agarrado a mi mano, pensé en salir de la mazmorra y agarrándome a mis cuatro primos salimos de allí.
-¿Quién nos ha salvado?
-No lo sé
-No me hagáis mucho caso, pero creo que ha sido el cristal
-¿Estás loca?
-Sí, eso es lo que creo
-Bueno qué más da, a lo mejor como estábamos inconscientes salimos por un agujero
-Es verdad, no lo había pensado
-Bueno, en marcha
Cuando nos pusimos a andar nos dimos cuenta de lo grande que era. Estuvimos horas por el castillo hasta que encontramos la puerta, pero estaba vigilada por dos fantasmas
-¿Y ahora qué hacemos?
-Marta, necesito que colabores. Tengo un plan: cuando Marta salga volando, los fantasmas la perseguirán y entonces Anxo sale y abre la puerta y salís vosotros primero
-¿Y tú que haces?
-Yo cojo a Marta por la pierna y salimos
-Vale
Nos funcionó el plan más o menos, porque les perseguían los fantasmas, yo alterada le dije a Nicolás que sacara una barca y unas alas como las de Marta, sacó todo lo que le había pedido y me puse las alas, cogí un extremo y les dije a todos:
-¡Subíos todos!
-Marta, coge el otro extremo ¡y a volar!
-Vale
Cogimos cada una de nosotras un extremo de la barca, y a volar, y como los fantasmas no podían salir del castillo por orden del rey, no nos persiguieron mucho tiempo, sólo unas tres horas